lunes, 7 de febrero de 2011

La Rochefoucauld (II)


Aquí os dejo otro grupo de máximas del escritor francés François de La Rochefoucauld para que podáis acercaros un poco más a su interpretación de la naturaleza humana:

• Nadie merece ser elogiado por su bondad si no tiene la energía necesaria para ser malo; cualquier otra bondad no es a menudo más que pereza o impotencia de la voluntad.


• No hay nadie tan inteligente que pueda saber todo el mal que hace.


• Hay malvados que serían menos peligrosos si no tuvieran ni pizca de bondad.

• Si resistimos a nuestras pasiones, ello se debe más a su debilidad que a nuestra fuerza.

• Estamos tan acostumbrados a disfrazarnos para los demás, que finalmente nos disfrazamos para nosotros mismos.

• La adulación es una falsa moneda que sólo circula gracias a nuestra vanidad.

• Lo que nos atrae en las nuevas amistades, más que el cansancio que nos producen las antiguas o el placer de cambiar, es la contrariedad de que no nos admiren lo bastante aquellos que nos conocen demasiado, y la esperanza de ser más admirados por los que no nos conocen tanto.

• Nos resulta fácil olvidar nuestras culpas cuando somos los únicos en conocerlas.

• Todos aquellos que cumplen con los deberes de la gratitud no por ello pueden jactarse de ser agradecidos.

• El orgullo no quiere deber nada y el amor propio no quiere pagar.


Os prometo seguir en próximas entradas con estas sentencias.

No hay comentarios:

Publicar un comentario